Esta investigación exploratoria, realizada por el Centro de Investigación y Promoción para América Central de Derechos Humanos (CIPAC/DDHH), en un sector de la comunidad de hombres y mujeres homosexuales costarricenses, no pretende ser representativa ni absoluta sobre las causantes reales a las que recurre esta población en específico para pensar, intentar o cometer actos suicidas, sin embargo, puede arrojarnos una luz en un tema tabú, dentro de la población en general y un motivo para profundizar en un futuro sobre esta problemática social.

El termino "gay" es un anglicismo que ha sido utilizado alrededor del mundo como un sinónimo de la palabra "homosexual", algunos grupos de gays y lesbianas censuran la utilización de esta palabra debido a que comenzó a utilizarse en el siglo XIX para determinar una patología (teoría ya comprobada como errónea), sin embargo, no hemos podido identificar alguna palabra de origen latino sinónima y des-estigmatizada de la palabra homosexual, dada esta situación hemos utilizado ambas en este documento.

A continuación proporcionaremos alguna información relacionada a la homosexualidad con el fin de que la interpretación y comprensión del fenómeno suicidio en esta población, sea considerado desde un punto de vista más integral.

Suicidio

Podemos interpretar el suicidio como aquella acción en la que la persona decide quitarse la vida. Este acto, que se podría considerar "voluntario" está rodeado de innumerables razones por las cuales las personas se sienten presionadas a tomar el suicidio como una alternativa.

Las poblaciones socialmente marginadas, llamadas popularmente "minorías", son propensas a depresiones severas que podrían conllevar a un acto suicida. Obviamente estas depresiones son producto de situaciones particulares como violencia, aislamiento, soledad, frustración, sentimientos de impotencia, entre otros.

La depresión es un trastorno mental, el cual lo podemos encontrar en diferentes situaciones particulares, como producto de una decepción, un duelo, o aquellas que se presentan sin ninguna razón aparente. Como síntomas podemos encontrar, el sueño excesivo o el insomnio severo, trastornos en el apetito, cambios drásticos en el estado de ánimo, desinterés en su apariencia y por aquellas cosas que usualmente se practicaban con satisfacción.

La depresión, provoca en el/la individuo, problemas en sus relaciones personales, laborales, familiares y sociales, sin embargo, es difícil saber con precisión cuantos/as padecen algún grado severo de depresión o trastorno mental.

La familia

El proceso de auto-aceptación de una persona homosexual puede ser un camino muy difícil y doloroso, para sí mismo/a. Como mencionamos anteriormente la homo/lesbofóbia interiorizada producto de toda la carga negativa recibida sobre la homosexualidad en el proceso de crecimiento y desarrollo del ser humano en nuestra sociedad, puede llegar a nuestras mentes antes de concebirnos a nosotros/as mismos/as como gays o lesbianas. La etapa de negación tratando de reafirmar una conducta heterosexual, más la etapa de religiosidad pidiendo a Dios una transformación hacia la heterosexualidad, pueden ser comunes en el proceso de aceptación, algunos/as lo superan, otros/as lo seguirán ocultando hasta la muerte.

El "salir del Closet", termino utilizado usualmente dentro del ambiente gay-lésbico, consta de diferentes pasos, los cuales no necesariamente se debe cumplir todos para considerarse "fuera del Closet", dentro de este encontramos la auto-aceptación, proceso que puede tardar hasta años, la segunda es el hacerlo "más público", este puede ser con amigos/as cercanos tanto gays o lesbianas como con personas heterosexuales y por último, a la familia (que es uno de los pasos más difíciles).

Cultura y sociedad

Como la homosexualidad no es social ni culturalmente aceptada, la negación y la vergúenza son barreras que dificultan los procesos de aceptación dentro de las familias.

La religión

Faltarán muchos años para que las religiones como la Católica o la Protestante, acepten oficialmente la homosexualidad como una expresión natural de la sexualidad humana.

Juan Pablo II a dado una pequeña luz en el Catecismo De la Iglesia Católica que dice bajo el título "Castidad y Homosexualidad", apartado 2358:

"Un número apreciable de hombres y mujeres presentan tendencias homosexuales instintivas. No eligen su condición homosexual; ésta constituye para la mayoría de ellos una auténtica prueba. Deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta..."

Aunque este texto reafirma la condición homosexual como una expresión natural de la sexualidad, la homofobia dentro de las religiones, siembra una de las mayores presiones sociales que desencadena en el permiso social para rechazar, discriminar, acosar y hasta asesinar a gays y lesbianas en nombre de Dios, quizá, irónicamente basados en el mismo texto, consideran este tipo de discriminación, justa.

Los discursos de miedo, culpa, vergúenza y pecado utilizados por las religiones conservadoras repercuten en las decisiones de la familia, la sociedad y las leyes para tomar decisiones firmes en contra de los atropellos dirigidos a esta población, sin embargo, la falta de credibilidad de los discursos de fanáticos tras un púlpito, hablando en nombre de Dios en busca de fines políticos, sexuales, económicos etc., están causando paulatinamente una transformación positiva hacia la tolerancia, el libre pensamiento y el concepto humanista en la población costarricense.

Factores Asociados al suicidio

Sexo:
El suicidio completo es de dos a tres veces más común en hombres que en mujeres.

Edad:
Se sabe que las tazas de suicidio aumentan con la edad, pero se ha observado un incremento porcentual en adultos/as jóvenes, llegando e triplicarse el suicidio entre personas de 15 a 19 años, en los últimos 30 años.

Estado Civil:
La tasa de suicidio en solteros/as es dos veces mayor que en casados/as.

Condiciones Socioeconómicas:
La tasa de suicidios es mayor en personas de nivel socioeconómico alto.

Ocupación:
El trabajo es, en general, un factor protector contra el suicidio.

Estado de Salud:
La relación entre enfermedad y suicidio es significativa.

Factores de Stress Psicosocial:
Eventos estresantes pueden actuar como precipitantes del comportamiento suicida.

La recolección de datos...

El equipo de trabajo del CIPAC/DDHH, consideró iniciar una investigación exploratoria sobre el suicidio en la población de hombres y mujeres homosexuales en San José- Costa Rica a mediados del año 1999. Para tal efecto, se formuló un cuestionario de treinta y una preguntas, este fue revisado y evaluado por gays, lesbianas, psicólogos/as, psiquiatras y un estadista, todos/as voluntarios/as de este centro. El área de Investigación del CIPAC, recolectó una serie de información sobre suicidio en Costa Rica e información general de éste tema en otras partes del mundo.

En setiembre de ese mismo año, se evaluaron una serie de centros de socialización de gays y lesbianas en Costa Rica que mantuvieran una población heterogénea, y que brindara las condiciones idóneas (seguridad, ubicación, horario, etc.) para llevar a cabo la investigación. El lugar elegido fue la Discotheque La Avispa en el Centro de la Capital josefina, se solicito el permiso por parte de la administración del lugar y se procedió a recoger la información con la participación de tres encuestadores/as.

Los/as encuestadores/as escogieron al azar, hombres y mujeres de diferentes edades, preparación académica y status social hasta completar las cien encuestas. Los/as encuestados/as mostraron gran disponibilidad para llenar los cuestionarios, éstos se hicieron asegurándoles el anonimato de la información suministrada, para tal efecto se codificó el cuestionario de 001 al 100, por lo que todos los datos utilizados en esta investigación exploratoria, se basan en lo que los/las encuestados/as manifestaron por escrito en el momento de la consulta.

Suicidio gay / lésbico

De acuerdo a estudios que han sido realizados en los Estados Unidos por Bagley y Tremblay en 1996, la probabilidad de suicidio en hombres gays y bisexuales se triplicó desde 1950 a 1990. Posteriormente, un estudio realizado por la Universidad de Minnesota en 1998, en el que se comparó la presencia de ideación e intentos suicidas entre grupos de gays y lesbianas con grupos de heterosexuales de similares características demográficas, demostró que los gays y las lesbianas jóvenes tienen 7 veces más probabilidades de cometer intentos suicidas que los/as jóvenes heterosexuales.

En un estudio sobre 137 hombres homosexuales y bisexuales, un 29% de ellos había tratado de suicidarse y casi la mitad de estos lo había tratado de hacer varias veces.

Hasta el día de hoy, nuestro país no cuenta con estudios profundos y amplios en torno al suicidio en la población gay/lésbica. Ello es aún más difícil debido a la carencia de información en los registros de intentos de suicidio y suicidios sobre la orientación sexual del individuo. La orientación sexual sólo es anotada si se determina, en forma directa, como causa del intento. En el caso de suicidios "exitosos", la opción sexual del/de la suicida no es investigada.

En términos generales y basados en la información del exterior, los gays tienen entre 2 y 6 veces mayor probabilidad de cometer suicidio que los NO gays, lo que podría significar que, prácticamente, "un 30% de los suicidios registrados, en hombres jóvenes, es de gays".

Desgraciadamente, durante el transcurso de esta investigación piloto, la intensa búsqueda de datos de investigaciones en torno a la problemática del suicidio de mujeres lesbianas no dieron resultados positivos. Podríamos afirmar que NO existen investigaciones formales publicadas que cubran y estudien, exclusivamente, el suicidio lésbico.

Resultados:

La muestra fue de 100 personas, congregados/as en un lugar de socialización gay/lésbico capitalino, en horas de la noche. Se aplicó al azar, entre los/as presentes.

1. Sexo: En total fueron realizadas 100 encuestas de las cuales 55% de ellos fueron aplicadas y respondidas por hombres, un 45% por mujeres.

2. Edad: La población estuvo compuesta en su gran mayoría por hombres y mujeres menores de 26 años (63%), de los cuales un 18% son menores de 20 años. El segundo grupo en importancia fue el de las personas con edades entre los 27 y 33 años (22%), seguidas por las personas entre 34 y 39 años con un 11%. Tanto en hombres, como en mujeres se observa el mismo ordenamiento por edad.

3. Escolaridad: Los niveles de escolaridad son muy diversos entre la población que fue encuestada, el siguiente cuadro resume los resultados por sexo:
Escolaridad Hombres Mujeres Total
Secundaria incompleta 13 12 25
Secundaria completa 10 6 16
Universidad incompleta 11 12 23
Universidad completa 11 10 21
Otros 10 5 15
Total 55 45 100
4. Trabajo y estudio: El 80% de las personas entrevistas cuentan con un trabajo remunerado y 52% realiza estudios actualmente. De las mujeres el 51% trabaja y un 49% estudia, en cuanto a los hombres un 87% trabaja y un 55% estudia.

5. Nivel de ingresos mensuales: El 42% de los/as encuestadas reciben entre ¢75,000.00 y ¢125,000.00 mensuales, un 28% reciben menos de ¢75,000.00 y el resto percibe más de 125,001.00 por mes.

6. Domicilio: Llama la atención que el 70% de las personas encuestadas viven con sus respectivas familias, un 12% de ellas con amistades y un 9% viven solos/as. De las personas que viven aún con su familia, la distribución por sexo es la siguiente: 75.5% de las mujeres viven con su familia y un 65.5% de los hombres permanecen en el hogar de sus padres.

1. Suicidio gay

En total fueron encuestados 55 hombres de los cuales 40 de ellos se considera o asume como homosexual o gay, 9 de ellos se asumen bisexuales, 4 manifestaron ser heterosexuales,1 dijo ser travesti gay y uno no pudo definirse en cuanto a orientación sexual.

La mayoría de los hombres entrevistados (48 de ellos) trabaja actualmente y un 54.5% estudia.

Llama la atención el hecho de que cuando, en sus trabajos o casas, se habla sobre el tema de la homosexualidad, gran cantidad de ellos manifiestan sentimientos de tristeza, temor, ansiedad, preocupación, burla y discriminación. Algunos pocos manifiestan orgullo, respeto y otros más positivos y abiertos.

En general la población participante en esta muestra (56%) indicó que consideran que la homosexualidad es una decisión personal voluntaria, mientras que un 37% indicó que lo considera algo que es biológicamente determinado. En este caso el 47% de los hombres dijo que era decisión voluntaria y un 44% que era resultado de un proceso biológico.

La mayoría de los hombres manifestaron una actitud de aceptación o apoyo en torno a la posibilidad de que algún hermano/a fuese homosexual, 37 de ellos dijeron aceptarle y 40 manifestaron que le apoyarían en caso de que los padres decidieran "echarle de la casa".

Un 42% de los encuestados informaron haber conocido a alguien que ha intentado quitarse la vida y un 29% manifestaron haber conocido a alguien que lo logró. Las razones más frecuentemente citadas para este acto fueron: contagio del SIDA, infidelidad de pareja y miedo al rechazo familiar y/o social.

Un 40% de los hombres de la muestra indicaron tener pensamientos suicidas, mientras de un 22% la ha intentado alguna vez, el 58% de los cuales lo ha intentado más de una vez, mismo porcentaje que el de aquellos que no ha recibido atención o apoyo psicológico después del intento. Un 25% lo intentaría de nuevo de repetirse la situación de vida que motivo el previo intento.

Un 58% de los hombres encuestados manifestó ser menor de 20 años cuando realizaron el primer intento suicida.

Para el grupo de hombres entrevistado el mayor problema de ser gay es el de la doble vida y el temor a que lo sepan 45%, seguido por el no reconocimiento legal y la falta de espacios. Un 16% consideró que no hay ningún problema y, únicamente, un 5% mencionó la salud como problema, sin embargo si mencionaban el contagio del SIDA como causante de la mayoría de los suicidios conocidos.

En general la población de hombres entrevistados considera que a las personas que intentan quitarse la vida hay que apoyarles, mientras que un 7.3% opina que son unos/as enfermos mentales.

Un 53% de los encuestados recomiendan brindar asistencia psicológica a las personas con ideación suicida, las otras recomendaciones hechas por los hombres van en el sentido de la ayuda espiritual (9%), Comunicación con padres, amistades y parejas (20%), apoyo emocional (amor y fraternidad: 7%) y otros.

2. Suicidio lésbico

La muestra de mujeres para esta investigación exploratoria fue de 45, la mayoría de ellas entre los 20 y 26 años (44%) entre los 27 y 39 años se ubicaban un 33% de las entrevistadas, únicamente 8 mujeres son menores de 20 años.

Un 71% de las mujeres se consideran o asumen como lesbianas, mientras que un 24% lo hace como bisexuales, una mujer se considera heterosexual y otra no sabe como identificarse.

De la muestra 51% de las mujeres estudia y un 71% trabaja en forma remunerada. 75.5% de ellas viven actualmente con sus familias de origen y un 11% lo hace sola.

Al igual que en la muestra de hombres, el mayor sector de mujeres se ubica en el rango de ingreso de entre ¢75,000 y ¢125,000 mensuales, seguidas por el grupo de menos de ¢75,000 (24%).

Las manifestaciones más frecuentes en cuando a los sentimientos cuando se habla de la temática homosexual en los trabajos u hogares son muy similares a las de los hombres: temor, tristeza, incomodidad, discriminación, enojo, nerviosismo, algunas de ellas mencionaron el SIDA como primera idea. Las mujeres llegaron a expresar sentimientos tan fuertes como asco, desprecio, rechazo y maltrato.

Para la mayoría de las mujeres encuestadas (67%) la opción sexual es una decisión personal voluntaria, un 29% manifestó considerar que es algo que es biológicamente determinado.

Para las mujeres el mayor problema es la doble vida y el temor a que se enteren (58%), seguido de falta de espacios (11%), y el no reconocimiento legal (6.7%). Tres mujeres manifestaron que no hay ningún problema.

19 mujeres, equivalente a un 42% de la muestra señalaron conocer a alguien que ha intentado quitarse la vida, 13% indicó haber conocido a alguien que lo logró.

Las razones que llevaron a tan drástica medida, en los casos en que se conocían, fueron: contagio por el VIH/SIDA, rechazo familiar y problemas de pareja.

De las mujeres encuestas un 18% manifestó tener ideas suicidas. Un 11% de ellas lo habían intentado, de ellas un 60% lo intentó en más de una ocasión. En todos los casos estos intentos tenían más de un año de haber ocurrido y, lo que las indujo fueron, principalmente, motivos pasionales (de pareja) y/o emocionales (familia, amigos/as).

Ninguna de las mujeres recibió apoyo psicológico con posterioridad y ninguna de ellas lo intentaría nuevamente, en caso de repetirse las circunstancias.

Al igual que en la población de hombres encuestados, las mujeres que intentaron quitarse la vida estaban en el rango etáreo de menores de 26 años, (60%).

La tendencia en las mujeres con relación a lo que piensan de aquellos/as que intentan quitarse la vida es hacia brindarles apoyo (36%), 20% hacia el pensamiento de considerarles unos/as cobardes y un 24% no sabían qué pensar sobre ellos/as.

La opinión del grupo de mujeres encuestadas sobre el tipo de apoyo o servicio que debería brindárseles es de un 42% para la ayuda psicológica y un 36% para la comunicación y cariño.

3. Suicidio GL en Costa Rica

Considerando la población como total, sin división por sexo, los resultados en torno al suicidio son alarmantes y sumamente preocupantes puesto que:

Un 42% de la muestra conoce a alguien que ha intentado quitarse la vida.
Un 22% de ellos/as conocieron a alguien, gay o lesbiana, cuyo objetivo fue logrado.
Un 30% tiene ideación suicida y mantiene el suicidio como alternativa de solución para sus problemáticas de vida.
Un 17% ha intentado quitarse la vida en alguna ocasión.
Un 10% de los que lo han intentado, lo ha hecho en más de una ocasión.
Un 13% del total de la muestra consideran que en el acto de suicidarse hay valentía, otorgándole a ello un valor positivo.
La mayoría de quienes lo intentaron NO recibieron o reciben atención o apoyo psicológico posterior.

Cabe resaltar que las condiciones psico-sociales, laborales y familiares en las que la mayoría de la población gay/lésbica costarricense parece desarrollarse, son elementos que promueven el suicidio y, que la dificultad para acceder a una atención psicológica libre de prejuicios y bien preparada para el manejo de las situaciones de vida GL en Costa Rica, perjudica a aquellos/as con dificultades psicológicas para hacerle frente a profundas crisis emocionales.

San José, febrero 2000
F. Madrigal
D. Suárez

Nota: El presente estudio puede ser citado y utilizado como referencia siempre y cuando se cite la fuente.